significa lo mismo, insuficiencia para cubrir una necesidad, o ausencia de algo indispensable.
La mayoría de las veces, la escasez o carencia no tiene nada que ver con lo externo, es una percepción interna que nos dice: “No hay suficiente”, “tengo que proteger lo mío” y ese sentimiento está haciendo que me repliegue sobre mi mismo y me haga quejarme de: "!Esto es demasiado caro¡", "!El dinero no me llega¡" “¡Haces más caso a los demás que a mi¡",“¡No hay oportunidades!”.
Si te quejas por lo que falta, crece, crece y crece.
Pero ¿qué sucede si cambiamos la dirección del pensamiento? La energía cambia y va en otra dirección.
Pero ¿qué sucede si cambiamos la dirección del pensamiento? La energía cambia y va en otra dirección.
¿En qué te estás enfocando? ¿En la alabanza, el amor, la gratitud, o en aquello que está mal, en lo que falta? Porque si estás haciendo eso, nunca nada será suficiente.
Cuando te enfocas en la carencia, en lo que te falta, el miedo es tan, pero tan grande que nunca habrá suficiente, nunca nada llenará lo que te falta.
Cuando te enfocas en la carencia, en lo que te falta, el miedo es tan, pero tan grande que nunca habrá suficiente, nunca nada llenará lo que te falta.
En vez de limitarte y limitar a los demás de pensamiento, palabra y actuando: “¡No puedo dar más! !tengo que pedir una rebaja¡, esta gente con lo que gana, !debería ser gratis¡” "!Las personas que tienen un don, lo deberían regalar¡". Aquí, solo habla el miedo: a quedarme sin dinero, a que me comparen con otros y se den cuenta de lo poco que valgo, a que ya no me quieran o peor todavía, a que quieran a otros más que a mi, miedo a que me falte, miedo, miedo, miedo.
Si quieres abundancia da ….. tu energía… tu tiempo… tu amor... !abundantemente! : “ Pedid y se os dará, dad y recibiréis “ .
El Universo es un enorme espejo donde lo mismo que estás dando, vuelve a ti abundantemente, así que debes echar fuera de ti ese miedo, respira, llena tus pulmones de aire hasta que ya no puedas más y suéltalo, hazlo varias veces, cuando el miedo y las inseguridades te atenacen, coge aire, suéltalo y repite a modo de mantra "estoy a salvo y en paz".
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Llevas toda la razòn, muy bien explicado y clarito como el agua. Muchas gracias porque viene muy bien que nos demos cuenta de la la actitud de escasez que tenemos (al menos yo) una gran parte del tiempo. Muchas gracias. Soy la anonima Rosarito
ResponderEliminarHola Rosarito,
EliminarMuchas gracias. Este articulo tiene tambien mucho que ver conmigo, yo tambien necesito parar el carro de la mente en el que a veces me meto y me me lleva por vericuetos muy para abajo.
Gracias por tus palabras tan cariñosas y de ánimo.
Un beso fuerte.