Qué nos dicen las manos del Dalai Lama

  Las personas conocidas, a nivel mundial, tanto por su ocupación, como por sus obras, son un instrumento muy válido para aprender Quirología.

Dalai Lama

El tener en mi poder, desde hace años, instantáneas de una exposición que el fotógrafo Francis Giacobetti, realizó en Diciembre de 1995, titulada: Los genios del siglo -miradas, gestos y rostros- y junto a otras instántaneas, que he podido encontrar, me ha decidido a hacer una Lectura, que a pesar de no verse todos los detalles de las palmas de las manos y no poderlo hacer muy a fondo, me ha permitido centrarme en algunos puntos de interés.

 La primera persona interesante y con material útil para trabajar, ha sido Tenzin Gyatso, actual Dalai Lama (1939) nacido en una familia pobre de origen tibetano en la provincia china de Quinghai (1935). 

Las Manos del Dalai Lama

 Desde que en 1950, cuando aún no había cumplido la mayoría de edad, los comunistas chinos invadieron el país y fue declarado mayor de edad, antes de tiempo asumiendo el poder de su país, su vida ha sido un continuo ir y venir como lo atestiguan sus manos, en las que todas las lineas salen disparadas hacia el Monte de La Luna, donde se marcan todas sus salidas al exterior recorriendo el mundo.

  El Dalai Lama, tiene las manos anchas, lo que habla de apertura de mente y que le gusta trabajar colaborando con las personas, que es de natural optimista y que no sólo da consejos, también los pide.

  Sus dedos, como canales de expresión, son también anchos y  aunque tiene un punto de timidez, porque a pesar de que el monte de Mercurio ( Meñique) está desarrollado, ese dedo tiene tendencia a ir hacia el interior de la mano, es una persona equilibrada porque la longitud de sus dedos de Júpiter (Indice) y de Apolo (Anular) es la misma.

 El equilibrio de sus Montes de Venus y La Luna le resultarán muy convenientes en el día a día, para mantenerse en el punto medio entre intuición y razón, aunque su Linea del Destino en la mano izquierda le llevará siempre a buscar la justicia, en sus actos y los de los demás y a plantearse siempre el porqué de las cosas.

 Que venia en esta vida, a liderar a otros, está claro en su mano derecha por la dirección de su linea del Destino que termina en el Monte de Júpiter, como también, que eso le ha acarreado muchos sufrimientos y la pérdida de muchos seres queridos, como se puede ver por la cruz que aparece bajo el pulgar de la mano derecha, extendiéndose por todo el monte de Marte.

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