Esta es una noche para recordar.

Yo te propongo rescatar esta noche el sentido que tiene para  nuestra cultura la noche de Difuntos, que para nada son las telarañas, las calabazas o el truco o trato que sabrá Dios que significa. 

Te sugiero que esta noche antes de que den las 12 honres  con una velita, una lamparilla o una oración a  los que han tenido un hueco en tu corazón y ya no están: abuelos, padres, tíos, primos, hermanos, amigos o amores que un día formaron parte de tu vida y ahora son polvo de estrellas o parte del arco iris que aparece después de una tormenta.

A todos y cada uno de ellos bendíceles, dedícales una pequeña oración, pídeles y pídete perdón por los equívocos entre vosotros, si los ha habido, agradéceles haberte acompañado en el camino y dedícales un pensamiento amoroso en esta noche de Difuntos, por haberte hecho con su presencia la vida más agradable. 

Ellos están ahí y es fácil que los hayas sentido como un roce, una melodía conocida o un perfume particular, es su forma de decirte que no estás solo que cuidan de ti y te quieren. ¡Feliz día de Difuntos!